miércoles, 25 de mayo de 2016

Sierra de Los Bígaros desde Saliencia (Somiedo).

Peña La Ferrera, El Muñón y Los Bígaros por la Cuesta La Contina y la Fana Brava desde la Foz de Los Arroxos.
Circuito desde Saliencia (Somiedo).




Llevábamos ya demasiado tiempo con estas cumbres en la carpeta de pendientes, así que ya era hora de hacerles una visita, y es que estamos hablando de una zona que, para mí, es de lo más bonito que hay en Asturias.
Las rutas más habituales y asequibles para ascender a Los Bígaros y El Muñón parten de Torrestío o del Alto la Farrapona.
Nosotros vamos a hacerlo desde Saliencia, siguiendo inicialmente la ruta que asciende por la preciosa Foz de Los Arroxos pero, vamos a darle "una vuelta de tuerca más" a esta ruta siguiendo un duro itinerario totalmente desconocido en el mundo montañero; ascenderemos por la empinada Cuesta de La Contina y la canal de la Fana Brava para ganar así el extremo noroccidental de la Sierra de Los Bígaros de la forma más directa. Variante diseñada por Víctor Orbayu y que demostró su viabilidad.
Opción ésta que, aún careciendo de especiales dificultades técnicas, si que requiere poseer una más que aceptable forma física.


Cota mínima: 1108 m.
Cota máxima: 2040 m.
Desnivel acumulado: 1200 m.
Distancia: 13,5 km.
Tiempo: 7:50 h (Con las paradas).

Aquí os dejo el track:
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=13545766

Por la AS-227 que sube al Puerto de Somiedo, nos desviaremos en el K 35 tomando la SD-1 que asciende al Alto La Farrapona pasando por Saliencia, localidad donde dejamos los coches en su amplio aparcamiento al lado de la carretera y punto de inicio de nuestra ruta (1108 m).

Comenzamos a caminar por la misma carretera sentido Sureste la cual continúa por el fondo del Valle de Saliencia y asciende al Alto de La Farrapona.
Al frente ya vemos el arranque noroccidental de la Sierra de Los Bígaros con la escarpada Peña La Ferrera a modo de proa y a donde ascenderemos inicialmente.

Hacia la cabecera del valle, los picos de Las Porzanas.

Vista atrás, la Peña Michu, inconfundible con sus pliegues calizos.

Tras algo menos de 1 km de recorrido por la carretera prácticamente en llano, abandonamos ésta por nuestra izquierda tomando un camino que vemos señalizado y que asciende hasta ganar el GR-101 Camín Real de La Mesa. Vamos a recorrer un tramo de la ruta de la Foz de Los Arroxos.

Ya en continuo ascenso, recorremos lo que se conoce como Camino del Puntón o Pontón.

Ganando altura sobre el fondo del Valle de Saliencia, nos comienzan a caer las primeras gotas de lluvia. Las previsiones para hoy no son muy alagüeñas.

Buen camino que discurre por un bosque de robles bien guapo.

Ascendiendo en sucesivas revueltas y encaminándonos hacia la Foz de Los Arroxos.

En constante subida, salimos a zona abierta donde somos vigilados desde las alturas.

Y nos vamos aproximando a la parte más angosta de la Foz de Los Arroxos por lo que se conoce como las Sierras del Puntón.

Alcanzamos así la parte más espectacular de la ruta de la Foz de Los Arroxos, donde el camino entallado y armado serpentea entre la caliza colgado a considerable altura sobre el río.
Vemos los escarpados sierros que se desprenden de la Peña La Ferrera.

Por debajo nuestro, La Fuentona del Puntón. Surgencia que vierte sus aguas al Río Los Arroxos.

Tramos vertiginosos que el camino salva sin mayor problema. Muy espectacular y bonito.

El camino, bien armado, comienza un descenso para situarse ligeramente por encima del Río Los Arroxos.
Esa pedrera que vemos en la otra vertiente, es nuestra referencia para abandonar este itinerario hacia la Cuesta de La Contina.

Una vista atrás donde podemos apreciar las potentes armaduras que soportan este camino.

El cual continúa con rumbo Noreste hacia la Braña de La Mesa interceptando el ancestral Camín Real.

Pero para nosotros se acabó lo cómodo.
Debemos abandonar esta maravillosa ruta de Los Arroxos para descender a vadear el río, e iniciar así el potentísimo ascenso hacia la Peña La Ferrera en el extremo noroccidental de la Sierra de Los Bígaros, cuya crestería pretendemos ganar.
Este ascenso lo podemos dividir en tres tramos bien diferenciados. En el primero de ellos debemos remontar la dura rampa para ascender a la Cueva de La Contina; oquedad caliza que vemos en la imagen.
Como os decía la pedrera será nuestra referencia.

Así que toca perder unos pocos metros y vadear el río (1378 m).

El arroyo desciende con abundante caudal pero no nos resultará complicado su vadeo, pese a que inicialmente parecía lo contrario.

Comenzamos la empinada y dura subida por la Cuesta de la Cueva La Contina.
Unos eligen ascender pegados a los impresionantes paredones calizos y otros por la pedrera.

En esta vista atrás podemos apreciar la verticalidad de esta rampa. La exigencia física es considerable.

Alcanzamos la Cueva de La Contina (1460 m), donde habitan multitud de golondrinas.
La lluvia, aunque no abundante, ya será constante.

Un descanso. Vemos el Camino del Puntón que hemos abandonado ya muy abajo.
La verdad que el paraje es extraordinario.

Continuamos ruta por la izquierda de la cueva en una breve travesía lateral.

Para iniciar el segundo tramo de esta ascensión por la no menos empinada panda de La Fana El Reitchu, manteniendo rumbo Sureste hasta interceptar un sendero por el que devolaremos los crestones que tenemos enfrente.

Interceptamos el marcado sendero (1543 m) siguiéndolo por nuestra derecha en rumbo Suroeste y dándonos un respiro al cortar en llano.

Devolamos los crestones pasando sobre una canal en la vertical de la Cueva de La Contina.

Pese a lo que pueda parecer no hay especiales dificultades técnicas, aunque si debemos prestar atención, que la caliza está mojada.

Salimos a la canal de la Fana Brava donde abandonamos el sendero, que continúa hacia zona restringida en la vertiente de Saliencia, para afrontar la dura subida paralelos al imponente sierro calizo que se conoce como el Serrón.
Iniciamos así el tercer tramo de subida y a mi parecer el más duro.

Muy fuerte pendiente en un ascenso que es largo y que cada uno remonta por donde mejor lo ve.

Nos envuelve la niebla; no hay problema, las paredes calizas son nuestra guía.

La dureza de este ascenso se ve compensada con su espectacularidad.
Me sorprende que esta opción sea desconocida en el ámbito montañero.

Empezamos a tener vistas muy bonitas sobre el Valle de Saliencia.
La niebla juega con el pico La Repeguera que más tarde ascenderemos.

Al frente intuimos un canto al que tenemos que llegar para iniciar la aproximación final a la Peña La Ferrera.

Esta vista atrás da idea de la dureza de esta subida. Impresionante el desnivel que vamos salvando.
Muy abajo, si nos fijamos, podemos apreciar la traza del camino de la Foz de Los Arroxos de donde venimos.

Un último tirón y la pendiente se volverá más amable, ya muy próximos de la Peña La Ferrera.

Como el tiempo no mejore lo vamos a tener crudo para crestear toda la sierra.
Santiago y yo, que vamos ligeramente adelantados, decidimos ascender los pocos metros que nos separan de la cumbrera de la Peña Ferrera. Los compañeros tiran directos al collado de La Pasada de La Ferrera.
En el otro lado del valle vemos el Camín Real de La Mesa bajo el Pico Aguil.

Peña La Ferrera (1819 m).
Debemos tener cuidado, la caliza está muy mojada y no es buen sitio para un resbalón.

Las vistas sobre el valle de Saliencia son impresionantes.
Con mejor tiempo veríamos alineadas las localidades de Saliencia, Endriga y Arbellales.

Cresteamos unos pocos metros para abandonar la arista y unirnos a los compañeros llegando ya a la Pasada de La Ferrera.

Pasada de La Ferrera (1810 m).
Collado que separa la Peña La Ferrera del Alto de La Ferrera.

Al sureste vemos lo que sería nuestra próxima cumbre, el Alto de La Ferrera. Dadas las condiciones meteorológicas nada favorables, ya hemos decidido que no seguiremos por la cumbrera de la sierra, puede ser peligroso.

Continuamos unos pocos metros por la arista hasta dar con un sendero que, por la vertiente de La Mesa, nos llevará en ligero descenso con rumbo Este a recorrer los puertos situados en una meseta elevada sobre la Veiga Busllaz y bajo la cuerda de la Sierra de Los Bígaros.

Marcado sendero que recorremos cómodamente y que agradecemos mucho después de la pindiada que nos hemos metido.

Nos aproximamos al collado sobre Tcháu La Mesa.

Collado del Tcháu La Mesa (1797 m).
Nos depara una sorpresa espectacular.

Bajo nosotros el bellísimo Tcháu o Laguna de La Mesa.
Un rincón emblemático de estos puertos cuyo origen es el deshielo.
(Pinchar para ampliar)

Bordeamos el lago.

Y continuamos recorriendo muy cómodamente estos puertos hacia el Sureste y paralelos a la sierra.
Adyacente al lago, vemos los vestigios de una majada, la Machada Vietcha.

Preciosos estos pastos.
Al frente ya vemos el Muñón.

Una panorámica hacia la Collada del Muñón o Puerto de La Mesa. A su izquierda el alomado Pico Las Piedras y, a la derecha, el Muñón.

A dejado de llover hace un rato y el tiempo está mejorando, así que comenzamos a ascender hacia la sierra para intentar coronar el Muñón.
Primeramente paralelos a un nevero, bajo la cumbre de la Peña Blanca, otra de las cotas representativas de la Sierra de Los Bígaros.

Nevero que cruzamos sin mayor problema.

Continuando por un senderín que nos encamina hacia la cuerda de la sierra para auparnos así a la Pasada del Muñón, collado que vemos enfrente y desde donde haremos el ascenso final al pico.
Para las gentes de Saliencia este topónimo de Muñón es desconocido, denominando como Los Bígaros y por igual a las dos cumbres más representativas de esta sierra. Por lo tanto esta pasada realmente se correspondería con la Pasada de Los Bígaros.

El tiempo mejora por momentos e incluso sale el sol que, junto con la brisilla que hace, ayuda a secar la caliza y parece que podremos atacar la cumbre sin problema.

Pasada del Muñón o de Los Bígaros (1936 m).
Vemos la Peña Blanca, por donde habríamos pasado de venir cresteando.

Las vistas por la vertiente de Saliencia hacia diversas cumbres somedanas ya son excepcionales.
Los Albos, Peña Orniz, Calabazosa, etc.
Así mismos vemos el Lago de La Cueva.
(Pinchar para ampliar)

Comenzamos a remontar la arista del Muñón hacia su cumbre.

Una arista muy prestosa que no ofrece gran dificultad y se recorre caminando, sin hacer uso de las manos más que en algún sitio muy puntual y sin ninguna complicación, aunque entiendo que a la persona propensa al vértigo le pueda resultar un pelín aérea. Eso sí con viento fuerte no es aconsejable.

Una panorámica hacia la vertiente de La Mesa, donde podemos ver la laguna del Tcháu y Machada Vietcha, así como el Pico Aguil a la derecha y sobre la Veiga Busllaz. Cumbre ascendida recientemente y que podéis ver AQUÍ.

Otra panorámica por la vertiente del Valle de Saliencia y la Cordal del Tarambicu.
Muy espectacular.

Aproximándonos a la cumbre.

Cumbre del Muñón (2037 m).
Hay que rodear esta profunda sima donde hay que tener precaución para alcanzar el vértice geodésico.

Las vistas son sencillamente espectaculares.
Al Sureste, continúa la arista hacia Los Bígaros. Vemos al fondo el picudo Morro Negro.

De Sur a Noroeste, las vistas hacia diversas cumbres somedanas y el Lago de La Cueva son sencillamente de escándalo.
Os señalo algunas.
(Pinchar para ampliar)

Un poco de zoom al Lago de La Cueva.

Bajo nosotros el Puerto de La Mesa o Collada Muñón.
Hacia el Este las nubes ocultan el Macizo de Ubiña.

Foto de grupo.

Continuamos hacia Los Bígaros.
De seguir por la arista deberíamos superar unos pasos comprometidos, por lo que la solución es perder altura por la vertiente norte que mira a La Mesa hasta una zona herbosa, donde continuaremos en horizontal por una zona que no es complicada, sólo prestar un poco de atención hasta dar con lo que se conoce como el "Corredor Rojo", un pasillo cuya caliza tiene un color rojizo y que nos conducirá con seguridad al collado que separa ambas cumbres.
Así que descendemos primeramente a la zona herbosa.

Continuando por este otro tramo que, sin ser complicado, si requiere la ayuda de las manos.
Vemos a los compañeros en la entrada del corredor.

Un nevero nos incordiará un poco pero sin mayor problema.

Y ya por el corredor, sin dificultad.

Salimos así al collado que nos separa de nuestro próximo objetivo, Los Bígaros, y que los mapas denominan Pasada de Los Bígaros (2002 m), aunque, como os comenté, realmente este nombre corresponde al collado anterior, la Pasada del Muñón.

El ascenso a esta cumbre no tiene misterio e incluso encontraremos jitos.
Una vista atrás hacia el Muñón.

Rápidamente alcanzamos la cumbrera.

Cumbre de Los Bígaros (2040 m).
Las vistas similares a las de su "hermano" El Muñón.
Morro Negro, Calabazosa, Orniz... y la carretera que llega al Alto La Farrapona. Uno de los puntos de inicio habituales para hacer esta cumbre.
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El valle de Saliencia con la cordal del Tarambicu.

Y el Puerto de La Mesa por donde pasa la divisoria con León.
Hacia Ubiñas sigue cubierto.
(Pinchar para ampliar)

Foto de grupo.
(Foto: Manuel Fernández Sánchez)

Nos vamos.
El descenso lo haremos siguiendo el mismo itinerario de ascenso hasta el collado que separa las dos cumbres.

Descendemos por la vertiente que cae al Puerto de La Mesa o Collada Muñón, por donde mejor nos parece. Es una ladera con mucha pendiente por lo que hay que tener precaución con las piedras que podamos arrojar a los compañeros.

Despeja algo hacia el Macizo de Ubiña.

Alcanzamos el Puerto de La Mesa o Collada Muñón (1785).
Por aquí pasa la divisoria con León detrás de la cual vemos el Pico Los Corros.

Una vista a las dos cumbres que acabamos de coronar, El Muñón (derecha) y Los Bígaros (izquierda).
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Nos incorporamos al Camín Real de La Mesa que iremos recorriendo con rumbo Noroeste en agradable paseo.
Ancestral camino de origen romano que daba una salida al Cantábrico desde la Meseta. Está señalizado como GR-101 y es una ruta senderista muy recomendable que parte de Torrestío (León) y llega a Dolía (Belmonte).
(Pinchar para ampliar)

Señalizado con reproducciones de miliarios romanos recorremos la Veiga Busllaz hacia la Braña de La Mesa.

Comienza a llover de nuevo y llegamos a la preciosa Braña de La Mesa (1670 m), dividida en varios conjuntos de corros, aunque se puede ver algún teito también.

Nos guarecemos de la lluvia bajo este teito para comer, que va siendo hora.

Nuevamente nos incorporamos al Camín Real para seguir ruta.
Nos vamos de vuelta a Saliencia, aunque pronto abandonaremos la ruta señalizada para hacer una variante.

Podríamos regresar a Saliencia descendiendo por el valle de la Foz de Los Arroxos que tenemos a la izquierda, o siguiendo el Camín Real hasta la Magadalena, donde cogeríamos una pista. Vamos a descender por la Veiga de Murias. Para ello primeramente continuamos hacia el Collado del Muro, que vemos al frente y, a continuación, ascenderemos a Los Cumales y La Repeguera.

Así que llegamos al Muro (1634 m), divisoria con Teverga, donde giramos a la derecha abandonando el Camín Real y ascendiendo inicialmente paralelos a los restos de la antigua muralla que defendía este paso y cuya historia os conté AQUÍ.
Rápidamente interceptamos un sendero que en poco tiempo nos lleva a la cumbre de Los Cumales donde tenemos muy buenas vistas (1705 m) y vuelve a despejar.

Bajo nosotros, la Foz de Los Arroxos.
En la otra vertiente, el arranque de la Sierra de Los Bígaros por donde ascendimos a la mañana.

A nuestras espaldas y ya en Teverga, el valle que vierte sus aguas al de Somoza donde se encuentra Barrio. Con la Peña Negra de Torce a la derecha.

Continuamos en rumbo Noroeste por la cumbrera que hace de divisoria con Teverga.

Y comenzamos a descender a una preciosa vega (1609 m) que nos separa de La Repeguera cuya modesta cumbre (centro-derecha) ganaremos en pocos metros.

Hacia el Noroeste imponentes, el Michu (izquierda) y la Peña Negra (derecha).

Sin ningún tipo de complicación ascendemos los pocos metros que nos separan de la cumbre de La Repeguera (1659 m), llamada en los mapas del IGN como Los Bueis.

Desde esta modesta cumbre tenemos una vista impresionante del itinerario seguido a la mañana para ascender a la Peña Ferrera.

Una panorámica.
La verdad que desde aquí se ve vertical de narices.

Con rumbo noroeste descendemos por una vereda por la vertiente de Saliencia, que vemos abajo, hacia una camperuca.

Una vista hacia la cordal del Tarambicu sobre el valle de Saliencia.
(Pinchar para ampliar)

Al Noroeste un poco de zoom hacia la preciosa braña de Las Morteras.

Sobrepasada la primera campera continuamos en descenso hacia una segunda camperina.

El descenso a esta segunda campera es bastante malo porque el terreno está muy tomado de monte bajo y se recorre mal.
Lo recomendable es pegarse a una dorsal caliza que es la zona más amable.

En esta campera interceptamos marcado sendero por el que bordeamos la Veiga de Murias.

Para acabar saliendo a la pista de Las Morteras por la que en menos de 1 km regresaremos a Saliencia.

Una última vista hacia la cabecera del valle, que está precioso.

Sin más, entramos en Saliencia finalizando esta fantástica ruta.
Cambio de ropa y a tomar la merecida cerveza.

Os dejo el perfil de elevación.

¡¡Un saludo!!