Pico Cogollu o San Justo desde La Nueva (Langreo).
Circular por el PR AS-164 y PR AS-44.
Cordal de Urbiés y Sierra Rebuyu.
- Paisaje Protegido de las Cuencas Mineras -
El Pico Cogollu o San Justo, situado en el Cordal de Urbiés y dentro del ámbito del Paisaje Protegido de las Cuencas Mineras, es el techo de Langreo, siendo su cima compartida con el vecino concejo de Mieres.
Modesta atalaya de la Montaña Central cuyo ascenso no reviste dificultad y desde la que se disfrutan de unas magníficas panorámicas.
La subida más habitual y corta a este pico suele hacerse desde el Alto de la Mozqueta o desde la aldea de San Justo en el valle de Turón, nosotros, sin embargo, vamos a realizarlo por la vertiente langreana partiendo de la localidad de La Nueva, en el Valle de Samuño. Itinerario éste que, si bien requiere un mayor esfuerzo, nos servirá para conocer el PR AS-164 Senda verde de los molinos; un sencillo y precioso paseo donde el agua es protagonista y que discurre por entre la frondosidad del bosque de ribera a la vera del Arroyo de Samuño, donde podremos observar un molino rehabilitado, que da nombre a la senda, y algún elemento vinculado a la antigua actividad minera.
Coronado el pico, continuaremos por la Sierra Rebuyu, siguiendo los pasos del PR AS-44 Vuelta a Langreo, para acercarnos hasta la localidad del Cáu desde la cual, y ya por carretera, iniciaremos el descenso de regreso a La Nueva.
Modesta atalaya de la Montaña Central cuyo ascenso no reviste dificultad y desde la que se disfrutan de unas magníficas panorámicas.
La subida más habitual y corta a este pico suele hacerse desde el Alto de la Mozqueta o desde la aldea de San Justo en el valle de Turón, nosotros, sin embargo, vamos a realizarlo por la vertiente langreana partiendo de la localidad de La Nueva, en el Valle de Samuño. Itinerario éste que, si bien requiere un mayor esfuerzo, nos servirá para conocer el PR AS-164 Senda verde de los molinos; un sencillo y precioso paseo donde el agua es protagonista y que discurre por entre la frondosidad del bosque de ribera a la vera del Arroyo de Samuño, donde podremos observar un molino rehabilitado, que da nombre a la senda, y algún elemento vinculado a la antigua actividad minera.
Coronado el pico, continuaremos por la Sierra Rebuyu, siguiendo los pasos del PR AS-44 Vuelta a Langreo, para acercarnos hasta la localidad del Cáu desde la cual, y ya por carretera, iniciaremos el descenso de regreso a La Nueva.
Cartografía IGN 1:25000 Hojas 53-1, 53-2, 53-3, 53-4 |
Cota mínima: 300 m.
Cota máxima: 1017 m.
Desnivel máximo: 717 m.
Desnivel acumulado: 840 m.
Distancia: 15 km.
Tiempo: 5:30 h (Con las paradas).
Inicio/Fin: La Nueva.
Por la AS-117 nos desviamos a Ciañu, para tomar la LA-7 Ciañu - Urbiés que, tras recorrer unos 4 km, nos lleva hasta la localidad langreana de La Nueva, en el Valle del Samuño.
Pueblo con un gran carácter minero desarrollado entorno al Pozo San Luis, y que debe su topónimo a la capa "nueva" de carbón descubierta allá por el 1870.
Aparcamos el coche precisamente en las inmediaciones del pozo, concretamente en la plaza donde se encuentra la Iglesia de San Luis, una pista deportiva, la asociación de vecinos y el centro de salud (300 m).
Comenzamos a caminar por la carreteruca que, desde la misma plaza y junto a la Fuente Quela, asciende hacia el Sur.
Por lo que toca afrontar un breve repecho inicial entre huertas.
Y por donde, al ganar unos pocos metros, tenemos una buena vista sobre La Nueva.
En nada, llegamos a un grupo de casas; Los Cuarteles (329 m).
Debemos entonces pasar a la parte trasera de dichas casas, según indican las marcas de pintura, que nos llevan a cruzar por entre unos gallineros.
Ya por senda, otra pequeña subida y nos adentramos en zona boscosa para, acto seguido y en ligero descenso...
...caer al cruce del Asentadero o Pradón, por donde discurre el Arroyo Samuño y al lado mismo de la carretera LA-7 que nos ha traído a La Nueva y que continúa hacia Urbiés por el Alto de la Mozqueta.
Seguimos hacia el Sur, adentrándonos en el valle y paralelos al margen izquierdo del Samuño.
Al poco el camino se bifurca, debiendo continuar por el ramal izquierdo hacia la aldea del Tendeyón, nuestro primer objetivo, como indica la señalización de este PR sobradamente balizado.
Que nos lleva a pasar junto a un antiguo cargadero de la mina La Basconia, por donde cae un buen chorro de agua.
Seguidamente nueva bifurcación.
Por la izquierda, el camino desciende a nivel del arroyo a un rincón donde se forman unas piscinas naturales y hay unas mesas un tanto abandonadas, pero debemos tomar el ramal derecho que asciende ligeramente sobre el cauce del río.
El camino recupera su antiguo empedrado al discurrir por entre la frondosidad del bosque de ribera.
Y, a nivel del Samuño, éste nos va dejando bonitas estampas en su descenso.
Así llegamos al guapo rincón donde se encuentra un molino hidráulico sobre el otro margen del arroyo y que da nombre a la ruta.
Se trata del molino de "Rufo y Fina", restaurado por su hija allá por el año 1998. No así el destartalado puente que le da acceso y que no invita a pasar; de hecho no cruzamos al ver su precario estado.
Una última vista de este bonito lugar y continuamos ruta.
Pocos metros adelante se encuentra el azud que capta el agua hacia el molino, y donde el arroyo forma un pequeño pero vistoso salto.
Cambiamos entonces al margen derecho del río cruzando por un primer puente.
Y el valle se encañona.
Siempre en tendido y cómodo transitar abundantemente señalizado, y donde veremos algún elemento vinculado a la mina.
Toca volver a cambiar de margen y ganar un poco de altura.
Hasta alcanzar el tercer puente junto a un portentoso castaño, para cruzar nuevamente a la otra orilla.
Y así llegamos al cuarto puente, donde lo cómodo se acaba.
Pues al cambiar de margen, nuestro camino hace una revuelta y comienza a ganar altura con fuerza sobre el fondo del valle, hasta cortar en llano por la vaguada de Les Sidreres, según nombra el mapa, cuya riega cruzamos por un quinto y último puente.
Debemos afrontar entonces un último tramo de camino empedrado que resulta ser un repecho bien pindio.
Para, ya cómodamente y en ligero descenso, aproximarnos a la pequeña aldea del Tendeyón, a donde accedemos pasando junto al lavadero y vemos la señalización hacia La Colladiella, en la Cordal de Urbiés, que es la que a partir de ahora nos atañe.
El Tendeyón (497 m).
Aquí se puede dar por finalizado este prestoso paseo de la Senda de los Molinos, que nos parece muy recomendable.
Pero nuestro destino es otro, por lo que tomamos la pista hormigonada que comunica el pueblo y desciende ligeramente hacia el Sur.
Caemos así a la encrucijada del Pumarón (480 m), que da acceso a la carretera LA-7.
Y donde vemos un panel informativo y la señalización de las otras dos variantes del PR AS-164.
Por la izquierda y cruzando la carretera, hacia Mayáu Miguel; por la derecha hacia La Colladiella, que es la opción que nos interesa, pues tenemos que subir a Campa Urbiés en la cordal homónima.
Así que tomamos la pista que asciende afrontando entonces el tramo más duro de la ruta.
Sostenido ascenso para solventar los casi 400 m de desnivel que nos separan de Campa Urbiés, pero que se llevan bien; inicialmente por pista hormigonada y pasando junto a las fincas de La Llera.
Pista que se aparta definitivamente del curso del Samuño para cambiar a la vertiente del valle de La Nueva, cerrado en su cabecera por la Cordal de Urbiés, donde ya vemos la pequeña prominencia del Cogollu, nuestro principal objetivo de hoy.
Cierra el valle por su margen izquierdo la Sierra Rebuyu, en cuya vertiente occidental se asientan las casas de Cullarriba y La Inverniza.
Así, con calma y "pali que pali", vamos ascendiendo entre las fincas de La Cabañola, la Borna Borra y La Campa.
Hasta llegar a una nueva bifurcación señalizada, precisamente junto a la cuadra de La Campa, donde debemos tomar el ramal izquierdo.
Ramal que nos aupa a una bucólica campera con una mesa y bancos de madera, que resulta ser un sitio ideal para hacer una paradita y picar algo (700 m).
Para luego continuar por un corto tramo tendido que da un respiro.
Y seguimos en ascenso por la cimera de esta pequeña cordal que se descuelga de la de Urbiés, dando vista por la izquierda a La Fresnosa, en el valle de Samuño, por donde sube la carretera hacia el Alto de la Mozqueta.
Ya próximos al Cordal de Urbiés vemos más cercano el modesto Cogollu, a la derecha del Pandu.
Y, en Práu'l Xabu, una panorámica de este Valle de La Nueva y Samuño, con la Sierra Rebuyu, donde destaca el Pico Espines.
Nuevo cruce al llegar a Práu'l Cordal, donde obviamos el ramal que, por nuestra derecha, invierte el sentido y que vemos en esta vista atrás.
Así que continuamos de frente manteniendo el rumbo y ya de forma tendida bordeando la finca de La Bornada.
Y, en nada, nos aupamos a la cordal al llegar a Campa Urbiés (855 m).
Sierra, esta de Urbiés, de unos 6 km de longitud, que se extiende desde el Tres Concejos al Pico Polio y es divisoria natural de los concejos de Langreo y Mieres, a cuyo término municipal nos incorporamos al pasar a la vertiente que cae al Valle de Turón.
Aquí abandonamos el PR AS-164 que, por la izquierda, continúa hacia La Colladiella. Toca seguir entonces el PR AS-44 Vuelta a Langreo que, en este tramo, también comparte itinerario con el GR-208 Anillo Ciclista de la Montaña Central.
Con rumbo oeste seguimos la pista que inicialmente bordea el Picu Pandu y pasa junto a las cuadras de La Campona.
Y que nos ofrece bellas vistas sobre el Valle de Turón donde vemos, por ejemplo, la localidad de Urbiés.
Sin apenas desnivel alcanzamos Campa Les Abeyes (870 m), desde donde ya vemos bien cerca el piquín del Cogollu.
Aquí hay instalados unos paneles informativos al respecto del entorno, pues es un buen mirador sobre estos valles de Mieres y cumbres de la Cordillera, como las del Macizo de Ubiña.
Inmediatamente llegamos a una bifurcación; por la izquierda, una pista desciende a la aldea de San Justo por donde viene el PR AS-34 Cordal de Urbiés pero, como es obvio, debemos tomar la de la derecha que vemos asciende y pasa bajo la cumbre del Cogollu, la cual se dirige a la braña de La Cerecina y La Mofosa.
Al rebasar la prominencia de Les Muezques, tenemos que estar atentos al punto donde debemos abandonar la pista para iniciar el ascenso al Cogollu (flecha).
Pero no hay problema, porque llegado el momento, vamos a ver la señalización al respecto.
Así que dejamos la pista tomando el marcado senderín que indica la señalización y por el que enseguida nos elevamos a Campa La Cervaliza (925 m).
Para girar a izquierdas y remontar por una primera cota.
La señalización sugiere bordearla por la izquierda, pero no es necesario y tampoco nos parece esfuerzo relevante.
Más adelante, veremos que también existe la posibilidad de obviar la cumbre del Cogollu siguiendo por una senda que soslaya el pico por la derecha.
Una vista atrás hacia Campa La Cervaliza.
Al fondo, y por detrás de la Cordal de Navaliego en la cabecera del Valle de Turón, asoma Peña Mea.
Salimos a un llano para acometer ya los metros finales por esta vertiente oriental.
Que no tienen más dificultad que seguir la marcada traza; eso sí, bien pindio.
Y, en nada, coronamos el Cogollu pasando primeramente junto a una pequeña bocamina a modo de santuario, que cobija a la Virgen del Carbayu, patrona de Langreo.
Cumbre del Cogollu o Picu San Justo (1017 m).
Máxima altitud de Langreo.
Con buzón de cumbre y una guapa reproducción de un castillete minero.
Modesta altitud para una perfecta atalaya.
Por el Oeste, el Valle de Samuño con la localidad de la Fresnosa asomando, al fondo, toda la Sierra de Peña Mayor con la Xamoca a su derecha.
También la Cordal de Ponga, con cumbres importantes como La Llambria, Campigüeños y Tiatordos, entre otros. Justo detrás, los macizos Central y Occidental de los Picos de Europa.
Un poco más a la derecha, Zorru, Pileñes y Peña Ten. Destacando en primer término el Tres Concejos, vértice de unión de los concejos de Mieres, Laviana y San Martín del Rey Aurelio.
Más al Suroeste, Peña Mea y la zona de San Isidro con el Torres y Toneo.
Hacia el Sur el sector del Estorbín en la Sierra del Cuadro.
Hacia el Suroeste, y casi íntegro, podemos ver el Macizo de Ubiña.
Por el Oeste, el cercano Pico Polio.
Al fondo, la Sierra del Aramo.
Y, al Norte, cerrando el Valle de La Nueva por su margen izquierdo, la Sierra Rebuyu con el Pico Espines, donde podemos apreciar la senda que lo soslaya y que en breve seguiremos. A su izquierda el Mayáu Porrín, que es nuestro siguiente objetivo a alcanzar.
(Pinchar para ampliar)
También y con un poco de zoom, las casas de la Inverniza y Cullarriba, incluso la localidad de La Nueva, en el fondo del valle y donde hemos comenzado la ruta (círculo).
Descendemos del pico por la vertiente contraria a la del ascenso, que vemos en esta vista atrás, para caer a unas camperas.
Por la izquierda de la piedra hincada y plana, se toma el camino que, a media ladera por la cabecera del valle, lleva hacia el Mayáu Porrín y que resulta ser la continuidad del que evita la cumbre del Cogollu por su vertiente septentrional, que antes comentábamos.
Pero el caso es que, pocos metros más adelante, vemos otras dos opciones:
Por la izquierda se pude tomar una pista que bordea la pequeña cota del Cogollín -que vemos al frente- y la del pico Felechosa, por la vertiente que cae a la braña de La Cerecina.
Total que, como no conocemos la zona y es la primera vez que caminamos por aquí, al no ver señalización (o no nos fijamos) le hacemos caso al mapa topográfico, que dibuja el PR por la cimera del pico Felechosa, así que tiramos de frente por la rampa herbosa a la derecha del Cogollín.
Para girar al Norte por llana cimera, desde la cual tenemos guapas vistas a los pastos de La Cerecina y La Mofosa, así como al Pico Polio.
Y por tímida senda, señalizada con alguna marca de pintura naranja a modo de flecha, hacemos cumbre en el Pico Felechosa (1004 m).
Vemos próxima la finca del Mayáu Porrín y el Pico Espines.
Atrás dejamos el Cogollu, en la cabecera de este Valle de La Nueva al que estamos dando la vuelta.
Pero qué pasa, resulta que nada más sobrepasar la cumbre del Felechosa, el sendero se desdibuja y nos topamos con la reforzada estaquera que cierra la finca del Mayáu Porrín.
El mapa sigue dibujando el camino de frente, que se debe corresponder con el antiguo que venía cresteando, pero no queriendo saltar el cercado, pues no sabemos si en caso de encontrar al paisano le parecerá buena idea, ya que vemos la finca muy cerrada, nos descolgamos pindiamente por la derecha, siguiendo el cierre y con precaución, hasta caer al camino que vemos más abajo y nos da deberíamos haber tomado en las inmediaciones del Cogollu. También se podría haber hecho hacia la izquierda de la estaquera, para ganar la otra opción de la pista.
Total que, ya en buen camino, ahora si vamos a ver señalización del PR AS-44.
Vista atrás, vemos la zona descendida un poco de aquella manera.
Alcanzamos entonces las cabañas y cuadras del Mayáu Porrín (970 m), en el collado que nos separa del Pico Espines, y a donde también llega la pista.
Continúa entonces el senderín soslayando cómodamente el pico Espines por la vertiente del Valle de La Nueva, aunque con alguna zona un poco embarrada.
Incluso curiosamente nos encontramos con un banco de madera a la vera del camino.
En descenso damos vista a la vertiente occidental de la Sierra Rebuyu, que cierra el Valle de San Juan por su margen derecho y por la cual corta nuestro camino.
Así caemos a Vega Espines (889 m), junto a la modestísima cota del Cullarriba, donde atravesamos algún tramo un poco anegado.
Y, poco más adelante, llegamos a una bifurcación donde debemos tomar el ramal de la izquierda, que desciende hasta el cruce que se ubica entre las fincas de La Gallega (838 m), para recibir por la izquierda otra variante del PR AS-44, incorporándose también el GR-208. Continuamos entonces ya por buena pista.
Pista que discurre sobre el camino antiguo, pues se adivinan restos de empedrado, siendo al parecer de origen romano, el cual cortando en llano, nos lleva a soslayar el Pico Cuetra.
Por nuestra izquierda el valle del San Juan.
Y así nos vamos descolgando hacia las fincas y casas de La Payega.
Por donde vemos lo que queda de un curioso mural, que nos da en su día tuvo encastrados elementos populares y tradicionales.
Desde La Payega damos vista a las inmediatas casas del Cáu.
El Cáu (670 m).
Comentar como curiosidad que, la línea divisoria entre Mieres y Langreo, pasa por mitad del pueblo.
Al llegar a la plazoleta -donde hay dibujada una "rosa de los vientos" en el suelo- nos dejamos caer hacia la derecha, abandonando el PR AS-44 y cruzando por la aldea en busca de la carretera MI-11 que desciende al Valle de Samuño y comunica con La Nueva.
Carretera que, con muy poco tráfico, discurre inicialmente entre frondosa arboleda y que ya no abandonaremos hasta nuestro destino final en La Nueva.
Un tramo que nos va a resultar un poco pesado, pues hay que comerse unos 3 km de asfalto.
A mitad de camino, cruzamos por la pequeña aldea de San Roque con su ermita.
Más abajo, vemos las casas de La Mosquitera al pasar por entre las del Pasaoriu.
Y ya por zona más abierta...
...entramos en La Nueva.
Donde pasamos junto al antiguo Pozo San Luis.
Explotación que la Sociedad Carbones de La Nueva comienza al abrir el pozo en los años veinte. En el año 1930 se construye la sala de máquinas, el castillete y un conjunto formado por viviendas y un antiguo economato.
En 1935 se construye la lamparería y, finalmente en 1945, el edificio para la central eléctrica que se derribó en 1991.
Actualmente el Pozo San Luis, declarado Bien de Interés Cultural, es visitable al ser sede del Ecomuseo Minero "Valle de Samuño".
Justo enfrente del pozo, se encuentra la Fuente el Querer, donde les moces iben a por agua, excusa pa cortexar con los mozos mineros.
Y, poco más adelante en el entorno de la plaza donde tenemos el coche, el monumento con placa conmemorativa en recuerdo de todos los trabajadores fallecidos en los pozos mineros del valle del Samuño.
Finalizamos así una guapa ruta con la que hemos ocupado una mañana.
¡¡Un saludo!!
Mi mas enhorabuena David. Me has dejado asombrado. Menudo reportaje, no sabes como he disfrutado con el.
ResponderEliminarTe lo vuelvo a repetir fabuloso. Te dire que forma parte de mi recorrido por el (( Territorio Comanche )) con la btt,
Muchas gracias por haberlo compartido, un fuerte abrazo
Muches gracies Sebastián!! la verdad que no conocíamos la zona y nos prestó mucho, así que habrá que volver, que tien muches posibilidades.
EliminarUn abrazo!!
¡Qué guapo! ¡Cuánto me prestó'l reportaxe! Tuvi unes cuantes veces nel Cogollu porque ye un llugar que me presta abondo. De toes formes nunca fixi'l vuesu percorríu que me paez perguapu. Prométome copiavos y facelu.
ResponderEliminar¡Norabona y gracies por enseñamos tan prestosu camín!
Muches gracies Arturo!! pues sólo podemos decite que te animes, porque ye un paséu bien guapu y muy sencillu, solo tar atentu a lo que comentamos del mayáu Porrín, que pues facer po la pista o pol camín, sin falta metete po la cimera del Felechosa. Po lo demás, ya ves que tien otres posibilidades si quies allargalu, el Polio, por exemplu.
EliminarUn saludu!!
¡Gracies pol conseyu! De xuru que vos faré casu.
ResponderEliminarPrecioso y muy trabajado reportaje. Habéis mostrado y embellecido una zona que por circunstancias bien conocidas, sufre un deterioro muy importante. Un trabajo enorme. Un abrazo
ResponderEliminarGracias Paloma!! Una zona que desconocíamos totalmente.
EliminarSale un paseo prestoso subiendo al Cogollu por esa vertiente de La Nueva y muy chulo el tramo inicial del PR AS-164 que va junto al Samuño.
Un abrazo.