Una cerrada nubosidad que envuelve Asturias nos hace cambiar nuestros planes montañeros, por lo que, Pancho y yo, nos dirigiremos a la vertiente meridional de la Cordillera, garantía de mejores condiciones meteorológicas en este día.
Pondremos rumbo a Mirantes de Luna (León) desde donde recorreremos el Valle de Borbusende y las Vegas del Palomar para ascender al Pico Amargones, crestear por los Montes Tijera y, pasando por el pico de la Vega Cercada, coronar el pico Cerro Pedroso desde el cual acometeremos el descenso entre sabinas a Mirantes de Luna.
En Mirantes, se encuentra el sabinar más septentrional de Europa y uno de los más importantes de la Península Ibérica por lo que no dejemos de admirarlo.
Cota mínima: 1115 m.
Cota máxima: 1914 m.
Desnivel acumulado: 1600 m.
Distancia: 25,5 km.
Tiempo: 10:30 h (con las paradas).
Aquí os dejo el track:
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=10368564
En la Autopista del Huerna (AP-66), cogeremos la salida a Villablino en el peaje de la Magdalena. Continuando por la CL-626 que va a Barrios de Luna y, bordeando el embalse, llegaremos en unos 8-9 km a Mirantes de Luna donde dejaremos el coche en una explanada, justo en frente del Club Naútico de León.
Cota máxima: 1914 m.
Desnivel acumulado: 1600 m.
Distancia: 25,5 km.
Tiempo: 10:30 h (con las paradas).
Aquí os dejo el track:
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=10368564
En la Autopista del Huerna (AP-66), cogeremos la salida a Villablino en el peaje de la Magdalena. Continuando por la CL-626 que va a Barrios de Luna y, bordeando el embalse, llegaremos en unos 8-9 km a Mirantes de Luna donde dejaremos el coche en una explanada, justo en frente del Club Naútico de León.
En este primer tramo nos acompaña un buen hombre que nos guiará hasta un sendero por el que libramos el trecho de carretera que, de otra forma, tendríamos que recorrer hasta el inicio de la pista de Borbusende, cerca del camping de Mirantes. De paso, también acortamos un poco el recorrido por pista, que va a ser largo.
Con rumbo Sur nos separamos de las ruinosas casas cruzando el Arroyo de Mirantes y siguiendo un sendero que, por zona boscosa, nos elevará por las estribaciones septentrionales de la Peña de las Arregueras, donde interceptaremos la pista que nos llevará a recorrer el Valle de Borbusende.
Peña de las Arregueras.
Interceptamos la pista forestal (1216 m).
Recorreremos Valle de Borbusende en suave pero continua pendiente con rumbo Este.
(Vista atrás)
La pista gira a rumbo Norte y, en este punto (1514 m), se bifurca.
Nosotros seguimos por el ramal que asciende hacia las Vegas del Palomar y la sierra de los Montes Tijera que vemos en la foto. El otro nos llevaría a la Sierra Negra.
La pista hace un giro hacia el Oeste para, dando un par de revueltas bajo la vertiente meridional de los Montes Tijera, ascender al collado de la Peña de los Refoyos.
Antes de llegar al collado haremos una paraduca en esta fuente-abrevadero donde aprovecharemos para picar algo y echar un trago.
Hacia el Este vemos el Alto de la Ensancha a donde en breve nos dirigiremos.
Unos metros por encima de la fuente, encontramos esta otra de donde coge el agua la anterior.
Mucho más recomendable, pues tiene el agua más fresca y menos turbia.
Nos alzamos al collado de la Peña los Refoyos (1625 m).
A nuestra derecha los Montes Tijera, cuya cresta en parte recorreremos en unas horas.
Abandonamos la pista invirtiendo nuestro rumbo al Este en dirección al Alto de la Ensancha, siguiendo cualquiera de los múltiples senderos de animales que recorren la parte baja de la vertiente meridional de los Montes Tijera.
Muy guapas estas vegas con este crestón calizo que nos recuerda a la cabeza de un cocodrilo dividiendo el valle en dos.
Rápida y cómodamente nos aproximamos al Alto de la Ensancha.
Alto de la Ensancha (1746 m).
Descenderemos al fondo del valle dominado por el pico del Alto del Palomar.
Perderemos unos 100 m de altitud hasta su punto más bajo.
Vista atrás, todo el valle recorrido desde el collado de la Peña los Refoyos que vemos al fondo.
Descendiendo al valle nos encontramos con antiguos corrales.
Preciosas estas Vegas del Palomar.
Recorremos el fondo del valle hacia el collado que vemos en la foto, con el Alto del Palomar a su derecha y que, en un primer momento, confundimos con el Amargones.
Nos acercamos a investigar un sumidero que observamos a nuestra izquierda.
Alcanzamos el collado (1708 m).
Vista atrás hacia el Alto de la Ensancha y todo el valle recorrido.
Ahora si vemos el Pico Amargones.
Enormes estos pastos que recorremos.
Iremos girando con tendencia Sureste hasta interceptar una pista que nos eleva al collado (flecha) que separa el Amargones de las estribaciones orientales del Alto del Palomar.
Pero antes una paraduca a echar un trago en esta fuente, vigilados de cerca por un par de mastines que controlan el abundante ganado que hay por la zona.
Pico Feliciano.
(Vista atrás)
Llegamos al collado (1761 m) y comenzamos el ascenso al Amargones en fuerte pendiente y siguiendo la cerca divisoria por un camino más que evidente.
La cerca y el camino que seguimos dan un giro a derechas y, al poco, lo abandonamos para continuar nuestro ascenso con menor pendiente por un canchal más entretenido y que se recorre muy bien, por lo menos en seco.
Llegando a cumbre nos encontramos restos de fortificaciones de la Guerra Civil.
Cumbre del Pico Amargones o Llamargones (1898 m - 11,5 km - 12:00 h).
Hacia el Oeste - Noroeste, las Vegas del Palomar que hemos recorrido.
Hacia el Norte, mirando hacia Casares de Arbás.
Tras un buen rato en cumbre descendemos nuevamente a las Vegas del Palomar, esta vez por la vertiente septentrional del Amargones y sin seguir ningún sendero, más bien por donde mejor nos parece.
Os señalo en amarillo el itinerario que a continuación realizaremos.
En rojo por donde hemos venido.
Pasaremos junto a este enorme abrevadero a modo de piscina (1636 m) cuya agua, una vez más, habrá que probar.
Nos acercamos a la entrada del valle formada por esta peña y la vertiente meridional del Feliciano.
Cruzaremos saltando una cerca divisoria.
Amargones.
(Vista atrás)
Vamos recorriendo el valle muy cómodamente siguiendo traza de sendero.
La intención es ascender al collado que os señalo a la derecha de los Montes Tijera y, una vez allí, decidir qué hacer, pues vamos improvisando un poco sobre la marcha.
Cruzamos una zona de piorno un tanto cerrada que tampoco supone mucho problema.
Saldremos a una zona más despejada y un poco más agreste donde entroncamos con el valle del Arroyo de Meleros próximos ya al collado.
(Vista atrás)
Alcanzamos el collado (1766 m).
Vemos la apetecible crestería de los Montes Tijera.
Decidimos encaramarnos a esta sierra de Tijera por lo que giramos a nuestra derecha siguiendo traza de sendero que nos lleva a lo alto.
Ganamos la cumbrera (1811 m).
Desde donde vemos otras posibilidades de ascenso hacia el Este, incluso más interesantes que la elegida por nosotros hasta llegar aquí.
Continuamos hacia el Oeste para ascender a esta cumbre cuyo nombre, si lo tiene, no he encontrado por ningún lado.
Os señalo el paso desde el collado.
Durante el ascenso y en cumbre, nos encontraremos abundantes restos militares de la Guerra.
Todas estas cumbres de la zona están repletas.
(Vista atrás)
Cumbre (1832 m - 16 km -14:00 h).
Aquí ya hemos decidido que recorreremos parte de la crestería de Tijera que vemos.
Os indico el descenso que haremos hasta el punto desde el cual acometeremos el ascenso a la cresta.
Nos aproximamos a la canal elegida para el ascenso a la cresta.
A la derecha los Corrales del Conde.
Entramos en la canal.
Entretenido, sencillo; sólo ayudarse un poco de las manos.
(Vista atrás)
Vemos a Pancho por el centro de la arista. Es lo bastante ancha para no dar sensación de patio.
Se recorre sin complicación. Otra cosa sería en condiciones invernales.
Realmente ancho en algún tramo.
A nuestra izquierda vemos la pista y el Valle de Borbusende recorridos hace unas horas.
De momento guapo y sin mucha complicación. Ayudarse de las manos puntualmente.
Aquí se complica la cosa.
Estamos ante una brecha por la que tendremos que destrepar.
Haremos unos destrepes sencillos y con buenos agarres pero donde hay que prestar atención (es más vertical de lo que parece en la foto), saldremos a la vertiente meridional y buscaremos una canaleta por la que, en una sencilla trepada, alcanzaremos la parte alta otra vez. Una vez arriba, abandonamos la arista por la vertiente septentrional, sin complicación, aunque pensamos que se puede continuar por la cresta fácilmente.
El recorrido por esta arista con hielo se complicaría bastante.
Cómodamente continuamos por esta vertiente norte manteniendo nuestro rumbo Oeste en ascenso hacia la cima de estos Montes Tijera.
Aproximándonos a la cumbre.
Cumbre de los Montes Tijera (1873 m - 17,3 km - 15:00 h).
Hacia el Oeste, el embalse de Barrios de Luna.
Hacia el Noroeste.
Descendemos volviendo sobre nuestros pasos hasta este collado.
Continuamos en descenso hasta los Corrales del Conde, donde hemos visto un abrigo natural con buena sombra que pinta bien para hacer un descanso y comer algo. Ya le habíamos echado el ojo desde la arista.
Os señalo por donde, posteriormente, ascenderemos hacia el collado del Puerto de la Cuencha y de allí hacia el pico de la Vega Cercada.
Deciros que, desde la Cuencha, tenemos una opción de descenso hacia Mirantes de Luna por el valle del Arroyo Tijera.
Elegimos un "restaurante" con muy buena sombra y agradable brisilla (1757 m - 18 km - 15:20 h).
Con 18 km en las piernas ya va siendo hora de reponer fuerzas.
Tras una buen descanso, continuamos ruta hacia el Norte para ascender al Pico de la Vega Cercada, pasando primero por el collado del Puerto de la Cuencha para entrar, seguidamente, en una zona de piorno que, sin embargo, recorremos sin problemas siguiendo senderillos.
Vista atrás vemos nuestro "restaurante" así como los Montes Tijera de donde venimos.
Cumbre del Pico de la Vega Cercada (1881 m - 18,7 km -16:10 h).
Hacia el Norte.
Hacia el Este.
Hacia el Sur.
Hacia el Suroeste, la cumbre de los Montes Tijera.
Nos dirigimos hacia la cumbre adyacente donde, una vez más, encontramos abundantes restos militares.
(Vista atrás)
Con rumbo Oeste seguimos unos metros por la arista.
Desde donde nos tiramos ladera abajo hacia La Collada (1748 m).
Para iniciar el ascenso al pico del Cerro Pedroso.
Subimos por su vertiente suroriental. Aunque es un pico formado mayormente de cuarcita, vemos en la parte izquierda zona caliza, siempre más limpia de vegetación, y que aprovecharemos inicialmente.
La aproximación final la haremos ya por terreno dominado por la cuarcita entre monte bajo, aprovechando algún senderillo y, otras veces, por donde mejor nos parece.
Cumbre del Pico o Cerro Pedroso (1914 m - 21,2 km - 17:14 h).
Máxima cota de la ruta de hoy.
Hacia el Noroeste y con zoom.
Hacia el Noreste y con zoom.
Embalse de Casares y, al fondo estarían Cellón, Tres Concejos, etc. Si no me equivoco.
Hacia el Sureste.
Al Sur.
La cumbre de Tijera.
Y el embalse de Barrios de Luna.
Descendemos por la vertiente suroccidental, primeramente hasta esta antecumbre (1833 m) que os señalo para, a continuación, continuar en fuerte pendiente hacia la pista que llega a Mireña de Luna.
Perderemos unos 600 m en apenas 2 km.
Zoom al puente colgante Ingeniero Carlos Fernández Casado sobre el embalse de Barrios de Luna.
Descendemos en ausencia total de senderos por donde mejor nos parece en fuerte pendiente, entre caliza y algo de monte bajo, pero con unas vistas preciosas.
Sin complicación, lo único no dar un tropezón que bajamos bastante rápido.
Pero tampoco es recomendable descender por aquí con niebla, no hay sendero alguno.
Zoom al Club Naútico. A donde tenemos que llegar.
Descendemos con tendencia a la derecha hacia una vallina que recorreremos en su parte baja (tramo follonero), para ganar la pista que va a Mireña de Luna, por la que, después de 1 km aproximadamente, la abandonaremos por nuestra izquierda hacia una amplia horcada que forman los Sierros Negros y La Senra.
Caemos a la vallina por una zona muy tupida buscándonos un poco la vida.
Nada recomendable si se lleva pantalón corto.
Tengo que comentar que, si hubiésemos cortado en horizontal esta vallina más arriba, posiblemente hubiésemos tenido un descenso más limpio, por lo que si planificais esta ruta, tenerlo en cuenta.
Todo para abajo, como mejor podamos, por el margen derecho de la riega.
Alcanzamos la parte más cerrada y estrecha que yo paso por el mismo centro y Pancho ligeramente más arriba.
Vemos a nuestra izquierda un cercado en piedra que cierra unos antiguos pastos e intuimos que pude estar más limpio por lo que accedemos a él.
(Vista atrás).
Y ya sin problema, salimos a la pista que va a Mireña de Luna por la que recorreremos 1 km aproximadamente con rumbo Oeste (1354 m - 23,2 km - 18:00 h).
Fijémonos a partir de ahora, si no lo hemos hecho antes, en las sabinas que nos rodean, pues estamos, como os dije al principio, en unos de los sabinares más importantes de la Península y el sabinar más septentrional de Europa.
Vallina descendida.
(Vista atrás).
Desde la pista, vista atrás hacia la vertiente suroccidental del Pedroso.
Os señalo el itinerario aproximado que seguimos desde la antecumbre; es más pendiente de lo que parece.
Después de recorrer 1 km aproximadamente, abandonamos la pista por nuestra izquierda.
Siguiendo un senderín cruzaremos la horcada que forman los Sierros Negros y la Senra para hacer ya un último descenso por el sabinar que cae a Mirantes.
Tenemos el Club Naútico ante nosotros, pero no os engañeis, porque vamos a entrar en uno de los tramos más folloneros de la jornada.
El sendero que seguimos se bifurca; nosotros cogemos equivocadamente el ramal de la izquierda que acaba despareciendo y nos vemos obligados a descender por una zona muy incómoda en la que haremos uso de las manos en algún punto. Acrecentado esto porque ya llevamos 25 km encima. Incluso, al final, nos vemos obligados a destrepar un pequeño muro para acceder al camino de entrada a Mirantes.
En esta ortofoto veis el trayecto que hicimos nosotros pero, si os fijais, a la derecha (sentido de nuestra marcha), se aprecia el buen camino (flechas). No se como estará de limpio a día de hoy, pero mejor que nuestro descenso, seguro.
Accedemos al camino que llega a Mirantes de Luna por la parte trasera de las ruinas de la iglesia.
En sus inmediaciones tenemos aparcado el coche (1115 m - 25,5 km - 19:00h).
Cervecita en el Club Naútico y para casa.
Esto ha sido todo!!
Os dejo el perfil de elevación
Un saludo!!
Una buena pateada si señor. Saludos
ResponderEliminarSí, la intención era hacer el Amargones pero, como nos supo a poco, fuimos improvisando y nos salió un buen pateo.
EliminarSaludos!!
¿Un buen pateo? ¡¡¡pero si no dejaste picu sin coronar!!! Estupenda actividad David. Gracias por compartir.
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